Me levanté temprano el domingo, sabiendo lo que iba a suceder pero sin querer decirlo, esperando que las horas corran y hagan lo suyo. Como cualquier día de elecciones yo estoy contento, aunque a mucho les molesta tener que votar, a mi me pone feliz, y eso que no hice el cambio de domicilio y me voy hasta Floresta cada vez que hay que sufragar. Para mi esos días se respira un aire distinto.
Después de una pequeña reunión familiar me fui a mi casa con cualquier excusa, ya eran mas de las 18 hs. y la televisión anunciaba el resultado de los comicios, que no era otro que el que se esperaba. Cuando ya estaban todos en casa, me fui tranquilo para la plaza. tomé el subte y me bajé a metros de la histórica plaza que vió tantas cosas. Como un fantasma me metí entre la muchedumbre, mirando con asombro la alegría reinante, unos choris me tentaban desde un costado, pero resistí y me interné mas entre esas almas que cantaban y bailaban. Grupos de chicas de no mas de 23 años daban rienda suelta a su felicidad, padres con criaturas en sus hombros con la cara iluminada, familias enteras que se sacaban fotos para inmortalizar el momento, fuegos artificiales, papelitos y un discurso que enfervorizó mas aun a las personas.
Cuando se acabaron los discursos me fui para mi casa, cansado de tanto tiempo parado, caminando por una desiertas calles del microcentro. Ya en casa comenté todo lo que había vivido, con una sonrisa en mi cara difícil de disimular.
No me siento un seguidor a ultranza de este gobierno, lo que si se es quien no quiero que lleve las riendas, me parece que cuando la gente dijo en esa misma plaza que se vayan todos estaban reclamando que se vayan todos los que hacen ese tipo de políticas que marginan y hunden al país, esa política que beneficia a los mismos de siempre y deja al país en la miseria mas profunda. Me parece que el pueblo le dio una clara señal a aquellos que se piensan que solo con el poder de los medios y los miedos se puede llevar de las narices a la gente.
Yo creo que en el país ahora hay mas igualdad, que falta mucho por hacer y mucho por corregir, pero me parece que este es el camino.
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