Acaba de transcurrir esta época del año donde el comer chocolate está permitido y se puede hacer ello sin culpa, a pesar de alguna personita que te diga " después te va a doler la panza".
No soy de respetar muchas tradiciones pero la de juntarnos con la familia el domingo de Pascua a comer y a romper los huevos (chistes obvios out) me gusta, la paso bien, disfruto la cara de alegría de mis hijos y sobrinos cuando tienen su huevo, conejo, gallinita o lo que sea que se pueda deglutir entre todos.
Parte de este rito es hacer ostentación de todo los artículos de chocolate que se posean en ese momento, foto mediante que dejará retratado para la posteridad este instante, se procede a contar hasta 3 para que muchas manos caigan sobre los huevos los destruyan y comience la comilona.
Después vendrán las roscas de Pascuas pertinentes con el cafecito y un lleno en la panza difícil de olvidar. Cuando comienza la desconcentración, se llevan los huevos sobrantes y hasta algún pedazo de rosca para compartir al otro día en el trabajo. Se reparte a la familia en cada casa, y finaliza un domingo más donde la tradición fue realizada en su totalidad sin omitir ningún paso.
Muchas gracias a todos los que colaboraron con llevar a cabo esta tradición, los que cocinaron, limpiaron, regalaron chocolates, llevaron roscas, hicieron de este domingo un día de paz y recogimiento... ah era una fecha religiosa?, otro infierno mas ganado...
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